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lunes, 7 de septiembre de 2020

CÁDIAR.

 De Fotografía y Senderos.

El municipio de Cádiar está situado en la parte centro-sur de La Alpujarra Granadina. Limita con los municipios de Bérchules, Alpujarra de la Sierra, Ugíjar, Murtas y Lobras. El municipio cadiereño comprende los núcleos de población de Cádiar, Narila, Yátor y La Rambla del Banco, así como diversas cortijadas. Tanto Cádiar como Narila se hayan localizadas en la margen este del Río Cádiar o Guadalfeo, estando Narila más al Norte que Cádiar. Yátor se encuentra en la margen este del Río Yátor. Cádiar se encuentra situado en un valle, por el que discurre el Río Guadalfeo, entre Sierra Nevada y La Contraviesa. Considerada por el hispanista Gerald Brenan como el “ombligo de La Alpujarra”. Cádiar goza de una posición estratégica siendo el nudo central de comunicaciones de la comarca alpujarreña. Es destacable la presencia de bastantes cortijos dispersos por el municipio que conservan la tipología alpujarreña. Como patrimonio minero se registran la Calera de Narila, de planta circular, y la Alfarería de Cádiar, que aloja uno de los hornos. La zona del municipio situada en la Sierra de la Contraviesa, forma parte del Sitio Histórico de La Alpujarra.CÁDIAREl origen de su nombre deriva del árabe “al cadí” -el juez-. En el siglo XV recibió el titulo de villa y tras la expulsión de los moriscos sufrió un éxodo masivo. Más tarde fue repoblada con colonos de otras partes del Reino. Narila fue, en tiempos del Al-Andalus, residencia permanente del juez principal de La Alpujarra oriental. En época musulmana el municipio estaba formado por cinco barrios y dos anejos. Durante la sublevación de los moriscos, en tiempos de Felipe II, fue patria de Abén-Xaguar, tío de Abén Humeya, y responsable de su elección. El primer jefe rebelde fue coronado Rey de Andalucía en un olivar cercano a Cádiar. Entre los yacimientos arqueológicos del municipio destacan el Cerro de la Tinaja de finales de la Edad del Bronce, y el Yacimiento de Narila, sobre un Peñón de 1.500 metros de altitud en el que se encuentran los restos de un antiguo poblado del alto medievo (la cerámica hallada es de época anterior a la población musulmana).


Cádiar ha sido históricamente un lugar de confluencia de los distintos caminos que se adentraban por toda la comarca alpujarreña. En un tiempo se le llamó "al-Basit" cuya traducción es "la llanura" por su situación en un lugar llano, de este mismo término proceden topónimos actuales como Albacete. Pero su denominación fue variando en el tiempo, hasta la consolidación de la denominación actual. Las primeras noticias que se tienen datan del siglo XII, cuando el célebre geógrafo granadino al-Idrisi señaló la existencia de un castillo en Cádiar, al que antiguamente se le había llamado "Hisn al-Qadir" («castillo del juez») en época Andalusí. Hay arabistas que consideran la evolución de su nombre por el uso que los propios mudéjares y moriscos hacían de Al-Qadír (desde la rebeldía) hacia el término "al-Qádr" (" el decreto"), en relación con "laylat al-qádr" traducida como "noche del decreto" o "noche del destino". Durante los periodos de época musulmana poseía una mezquita mayor, varios cementerios, rábitas y al menos tres barrios diferenciados por sus respectivas murallas. En el periodo nazarí perteneció a la extensa tahá de Juviles junto con otras dieciséis aldeas.


Tras la Reconquista de Granada en 1492 por los Reyes Católicos, la población se vio poco a poco sometida a una represión creciente durante los años posteriores, orquestados por la corona de Castilla y la Iglesia romana a través de la Santa Inquisición ("Inquisición romana").[2]​ Acoso que llegó a convertirse intolerable en el reinado de Felipe II con la promulgación de la Pragmática Sanción de 1567 (o "Pragmática Antimorisca").[3]​ Este edicto tuvo sus consecuencias y en 1568 un descendiente de la nobleza morisca, de nombre cristiano Hernando o Fernando de Válor y Córdoba y de nombre musulmán Muhammad ibn Umayya. El nombre de Abén Humeya es la versión hispanizada del nombre árabe Ibn Umayya, que significa "Hijo de Umayya" haciendo alusión a un antepasado de los Omeyas. Fue coronado en el camino que, de Cádiar, dirige a su población vecina Narila y encabezó la Rebelión de las Alpujarras (1568-1570), aunque murió asesinado por los propios sublevados a los pocos meses de iniciarse la contienda. La concesión del título de villa a Cádiar — propició el levantamiento en armas contra el rey Felipe II siglo XVI, provocando una revuelta general entre los moriscos de todo el Reino de Granada, convirtiéndose Cádiar en escenario de gran parte de los acontecimientos ocurridos durante la Sublevación de los Moriscos de 1568.


Los musulmanes serían definitivamente expulsados a otras provincias Castellanas y en menor número a África en 1609. Quedó una minoría morisca amiga de la Corona y contraria a las revueltas y otros escondidos en las montañas. Algunos volvieron posteriormente estas tierras, ya no como moriscos. Eran pobladores que habían asumido definitivamente el cristianismo, olvidado el finalmente prohibido dialecto nazarí del árabe que se hablaba en todo el Reino de Granada, asumido el idioma castellano, tenían nombres cristianos y ya no practicaban las costumbres musulmanas. Pero esto posteriormente a la repoblación planificada por Castilla, con campesinos procedentes de Jaén, Cádiz, Galicia y Castilla 💎👑🙏🏼

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