2013 arranca con subidas de teléfono, luz, transporte y otros productos básicos.

Aunque la profecía maya del fin del mundo no se ha cumplido, algunos consumidores lo habrían preferido. El inminente 2013 llega cargado de sorpresas poco agradables para el bolsillo. El último Consejo de Ministros que se celebra este viernes tiene previsto dar la puntilla a unas semanas de malas noticias para las economías domésticas, con subidas generalizadas en muchos productos o servicios básicos, como la luz y el teléfono, a las que probablemente se sumará otra en el transporte de trenes de cercanías y de media distancia, según se filtró en la jornada de ayer jueves.
Los usuarios pueden ir haciendo cuentas para calcular cuánto supone en su presupuesto de viaje diario una subida media del 6% por tique, según ha requerido el operador público de trenes Renfe. La revisión al alza llegaría sólo medio año después de que, el pasado 1 de mayo, las tarifas subieran más de un 10% de media en las mismas modalidades de transporte ferroviario por las rebajas simbólicas en el AVE. Ahora sólo falta que la propuesta, que duplica la inflación del mes de noviembre (2,9%), sea aprobada en el Consejo de Ministros de este viernes y tenga fecha de entrada en vigor durante 2013.
De momento, lo seguro es que el gigante Telefónica podrá redondear al alza la factura mensual gracias a la resolución aprobada ayer jueves por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), que permite a la operadora aumentar la cuota de abono (13,94 euros) hasta el IPC como máximo entre los años 2013 y 2016 después de llevar cinco años congelada. La cuota de abono, conocida popularmente como 'alquiler de línea', era el único precio minorista que hasta ahora continuaba estableciendo el regulador, potestad que este último ha propuesto dejar de realizar dado el nivel de competencia.
Otro recibo que cogerá vuelo será el de la luz. A partir del próximo 1 de enero, aquellos usuarios que estén acogidos a la tarifa de último recurso (TUR), es decir, la mayoría de los hogares españoles, pagará un 3% más. Así quedó determinado hace una semana después de que la subasta de energía entre comercializadoras eléctricas se cerrara con subidas del 6%. Un repunte que sigue la tendencia al alza que viene soportando esta factura tras los nuevos impuestos aplicados al sector, tanto las nuevas medidas fiscales como las eventuales subidas de peajes, para contener el déficit de tarifa.
De momento, el precio del butano y del gas licuado del petróleo quedan al margen de las subidas previstas para 2013, como ha tenido que precisar el ministro de Industria, José Manuel Soria, tras explicar cuáles son los motivos por los que el recibo de la luz subirá a partir del nuevo año por decisión directa del Ministerio, que ha decidido no modificar los peajes a la baja para atenuar la subida de precios surgida en la subasta entre comercializadoras, un factor que representa cerca del 50% del recibo final. Aun así, todo es susceptible de cambiar de nuevo en la subasta de marzo.
Aunque las estimaciones oscilan en una horquilla del 10% al 30%, lo único que bajará de precio durante 2013 serán los pisos. Voces internacionales como la agencia de calificación Moody’s o distintos portales inmobiliarios locales, todos coinciden en señalar que el sector seguirá corrigiendo a la baja, ante el stock existente, el incremento de la morosidad y la creación del banco malo, que está previsto que comience a gestionar los activos transferidos por las entidades nacionalizadas (hasta 36.000 millones) a partir de la segunda mitad del año. Al menos en este caso queda claro que todo lo que sube, baja.